El origen de este Museo se halla en la colección de figuras de plomo que desde los años 60 fue reunida por Carlos Royo-Villanova, entusiasta miniaturista y amante de la historia. Los soldaditos de plomo y sus accesorios, todos a la misma escala: 1:87 (unos 20 mm de altura). Con ilusión y paciencia fue formando ejércitos de todo el mundo y de todas las épocas hasta reunir más de 35.000 piezas. Dicha colección fue adquirida por el Ayuntamiento de Jaca en 1984 y expuesta en el Fuerte Rapitán.
Se ha querido aprovechar la colección de figuras para potenciar su carácter educativo, desarrollando un guión que, escenificado en los dioramas, sea capaz de enseñar a todo tipo de público la historia de las civilizaciones desde la óptica de sus ejércitos.
La visita guiada, organizada en grupos reducidos, dura unos 50 minutos y el visitante recorre el museo guiado por la luz y acompañado de explicaciones, música y efectos de sonido. También se ha acondicionado una sala de actividades didácticas, donde se pueden organizar conferencias, pases de películas, talleres de miniaturas, juegos de recreación histórica, concursos de maquetas, etc