Estamos en pleno centro de Granada, en la confluencia de la Gran Vía y la calle de los Reyes Católicos. Con motivo del cuarto centenario del descubrimiento de América, en 1892, se encargó a Mariano Benlliure la elaboración de un monumento conmemorativo en el que se representara a Isabel la Católica, en el momento de hacer las Capitulaciones a Cristóbal Colón, por las que se le faculta para explorar los territorios que puedan existir más allá del Atlántico.
Benlliure realizó el grupo escultórico en Roma y se instaló en primer lugar en el paseo del Salón, hasta que fue trasladado a su ubicación actual.